jueves, 26 de mayo de 2011

Mykonos - Grecia

Mi trabajo esta vez me ha llevado a viajar a diferentes sitios, todos ellos nuevos para mí. Primero me ha tocado ir en crucero por las islas griegas, Venecia y Dubrovnick, para, a continuación, un viaje a Asia. Os lo voy contando en diferentes posts…


Una de las primeras paradas del barco fue Mykonos. Esta isla griega es conocida como la “Isla Gay”, y en temporada alta (mayo a octubre) la isla se llena de gente y se celebran muchas fiestas (vida nocturna intensa). A las 10 de la mañana la mayoría de los bares todavía no estaban abiertos, porque la isla funciona a toda potencia por la noche, no por la mañana. El barco atracó nos dejó en el puerto, que estaba muy cerca del centro  en autobús.


Hay tiendas de regalos, souvenirs y cosas para turistas en prácticamente cada esquina. Con la crisis económica en Europa y especialmente en Grecia, seguro que muchos de los ingresos vienen del turismo, y siempre hay turistas llenando las tiendas de souvenirs – comprar o no, es otro tema, pero por lo menos miran.


La isla tiene varias playas, pero en la fecha en que estuve allí (abril),  al no ser todavía temporada alta, hacía sol pero muchísimo viento. De hecho, los locales no recomendaban acercarse a la playa. Realmente, hacía muchísimo viento. Imagino que las playas son bonitas, ya que son bastante conocidas y destino de mucha gente en verano – marcha y fiesta por la noche, y playa durante el día.


Pasear por las calles de Mykonos con una cámara fotográfica es toda una experiencia. Las calles son en su mayoría estrechas, y las casas y construcciones hechas de piedra y pintadas de blanco. Las puertas y ventanas casi siempre son azules, como en la película “Mamma mía” (aunque fue rodada en estudio, se simulaban diversas localizaciones de Grecia).


También hay una zona con molinos de viento (que no falta allí) y varios bares muy cerca del mar – incluso es muy posible que te salpique agua de alguna que otra ola del mar. El olor a gambas a la plancha en los bares era muy rico. La isla es bonita, no demasiado grande, pero tiene su encanto. Tendré que volver algún día en verano, para experimentar la marcha de allí, y también bañarme en sus playas...



No hay comentarios: